La identidad de uno comienza a cambiar con el trabajo de purificación. El sentido de aislamiento forjado por el yo separado gradualmente da lugar a la conciencia de la unidad esencial de todas las almas. El amor, alegría, y sentido de propósito que pertenecen al Yo verdadero se vuelven parte del vivir diario.
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La Identidad del Alma es la tercera de las diez fases de nuestro viaje.
Las citas a continuación reflejan nuestras experiencias.
“El reconocimiento del alma ha estado creciendo dentro de mí por un largo tiempo. Pero ahora existe un claro apercibimiento del Alma como el Observador siempre-presente – un “testigo” silencioso de todas las actividades promulgadas por el pequeño yo. El cambio para mí vino mediante la experiencia del trabajo grupal bajo guía Ashrámica. En la claridad de esta luz más elevada, comenzó a crecer un puente entre la personalidad y el alma, volviéndose más viva y más visible para el ojo de la mente.”
“Después de muchos años de situaciones desafiantes, me encuentro como en casa con un grupo de dedicados y efectivos discípulos. Los hilos inimaginables de circunstancias que me llevaron hasta aquí pueden sólo ser explicados por el hecho de que el Alma estaba dirigiendo la experiencia de ida, pese a los caprichos de la personalidad. Esto me ha demostrado que el alma en verdad controla la forma externa. Si tal conciencia está sucediendo en nosotros, también lo está en muchos otros, y sugiere que un nuevo mundo formado por almas despiertas, alineadas con el propósito divino, es inevitable.”
“Mediante la participación en este grupo, veo el mundo diferente y reacciono diferente. Me siento menos separada y puedo ver la vida a través de una lente más amplia que antes. Mis interacciones con las personas han cambiado. La energía conectora que fluye desde el Ashrama a través del grupo es poderosa – nos abraza, y respondemos a ella. A medida que escribo esto, casi siento que no debería usar la palabra “yo”, porque ya que no me siento como un “yo” individual.”
“Años atrás, comencé a comprender que realmente todos somos uno. Comencé a captar la interconexión de nuestras almas – TODAS las almas – y a darme cuenta de que cada daño y acto de bondad, cada desafío y victoria, nos afecta a todos. El experimento humano como separado de Dios pronto terminará porque estamos experimentando que en realidad somos uno…y uno con la Fuente de vida.”
“Nuestras meditaciones me han llevado a una elevada conciencia del alma, recordándome de el ver todo a través de los ojos del alma. He experimentado una repetición de mi vida desde la más temprana infancia hasta ahora y reconocido a mi alma como un núcleo interior de verdad que ha permanecido como un hilo dorado a través de todos los desafíos que he afrontado. Cuando las emociones dominan, la personalidad sufre grandemente. Pero mi alma es tan serena como un espejo de agua tranquila.”
“Saber que uno es un alma trae una nueva conciencia que se define por el amor. Existe un actitud altruísta hacia la vida que se siente tan distinta de ser una personalidad aislada.”
“Ocurre un cambio masivo cuando permitimos que el Alma dirija nuestras vidas. Cuando aprendemos a oír con el oído interno las inspiraciones del alma, la personalidad es transformada en su instrumento y todo se vuelve posible."
“El alma despierta el amor de la belleza en nosotros junto con el sentido de fraternidad y un fuerte impulso hacia el bien mayor. Existe un deseo de expresar la luz del alma en el mundo. Soy consciente de que el proceso de transformación recién ha comenzado en mí, pero mi atención está siempre dirigida a revelar la presencia del alma, frecuentemente oculta detrás de un velo de palabras.”
“La mayoría de las veces, la luz del alma es oscurecida por las barreras y límites de los ambientes mundanos. Pero en compañía de almas de una frecuencia resonante, en conversaciones nutridas por pensamientos acerca del mundo interno, la naturaleza oculta del alma viene a la luz y uno avizora un modo de ser diferente.”
“En meditación, tuve una visión del futuro que nos espera. Sentí un irreprimible sentido de alegría mientras emanaba amor, y un sentido de ser una luz que estaba fusionándose con otras luces en total libertad. Era una fiesta para el alma.”
“Al vivir en conciencia del alma la mayor parte del tiempo, es más fácil liberar la energía inferior de la personalidad cuando surge y retornar a la belleza, el amor y la plenitud de la vibración del alma.”
“Sé qué es el miedo, nacido de la ignorancia y de la identidad equivocada, lo que mantiene a mi personalidad atada y contraída. Las elecciones inconscientes que hago en este estado no son dadoras de vida y componen mi sufrimiento. Sé que el antídoto para el miedo es el amor, al puede accederse desde mi naturaleza superior como alma. Sé que abrazar el presente momento como mi verdadero Yo expande mi experiencia de vida, trayendo alegría, gratitud, paz, creatividad, y compasión.”
“Hay cosas que sé que son ciertas. No sé esto de libros o conocimiento impartido por otros. Este conocimiento es algo profundo que late en cada célula de mi cuerpo, y no necesito justificarlo o probarlo a nadie. Sin embargo, me regocijo cuando otros encuentran esas verdades por sí mismos.”
“Percibir el amor, la alegría, y la belleza en todas las cosas…en cada pensamiento, cada acción, cada encuentro…me permite concebir un nuevo mundo creado por almas conscientes, amorosas.”
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Corriendo el velo del Secreto del Alma:
Un Ensayo
“Cuando haces cosas desde el alma, sientes un río moviéndose en tí, una alegría.”
– Rumi
Rumi, el gran poeta, erudito y místico Sufí era una encarnación de un alma plenamente despierta. Un discípulo de la verdad, iniciado en los secretos y misterios de la vida interior. Mediante su poesía y enseñanzas espirituales, Rumi reveló a la humanidad la esencia del Yo verdadero. Remarcablemente, aunque vivió durante el imperio persa del siglo XIII, en tiempos de Genghis Khan, sus escritos han dejado huella en almas en despertar a lo largo del globo durante ocho siglos.
Rumi ha sido descrito como sigue por un traductor contemporáneo e intérprete de sus escritos:
“Rumi es una de grandes almas, y uno de los grandes instructores espirituales. Nos muestra nuestra gloria. Quiere que estemos más vivos, que despertemos…quiere que veamos nuestra belleza, en el espejo y en los demás.” 1
Este pasaje, junto con las palabras de Rumi de arriba, ofrece importantes claves sobre lo que significa lograr la identificación con el Alma. Lo que sigue son unos pocos pensamientos sobre este estado del ser.
Actuar desde el alma. Podríamos llamar a esto “Vida Inspirada” – tomar dirección y acción en nuestras vidas desde nuestro yo superior. Esto involucra volverse receptivos a la guía interna y seguir los dictados de nuestras almas, “los mejores ángeles de nuestra naturaleza”.
Experimentar la alegría. La Sabiduría Eterna describe a la alegría como una cualidad primaria del alma. El estado de alegría surge cuando el corazón se abre y los yoes inferior y superior quedan alineados a través del amor. Cuando esto sucede, la mente registra la gracia que ingresa desde este amor, evocando sentimientos de pura alegría.
Sentir un río moviéndose dentro de ti. Esta frase evoca la corriente de amor, luz y poder que fluye a través de un alma despierta que está abierta a la impresión espiritual, viviendo la vida bajo inspiración divina.
El intérprete de Rumi lo describe tanto como “una gran alma” como “un gran instructor espiritual”. Una gran alma es capaz de actuar como mediadora entre la Mente Divina y la inteligencia humana, sirviendo para traer al propósito divino a la expresión en el mundo. Las obras de Rumi han ido preparando las mentes humanas para la emergencia del Alma durante muchos siglos. Ahora, en el portal de la “Era del Alma”, sus obras contribuyen directamente al plan de la evolución.
Los genuinos instructores espirituales son individuos conscientes del Yo que toman su lugar en la Gran Cadena del Ser como mediadores entre aquello que es de una vibración más refinada y lo que es de vibración más burda. Son seres que han entrado a un estado de conciencia desde el cual pueden ver en dos direcciones – arriba y abajo. Son los intuitivos del mundo que tienen la capacidad de registrar ideas divinas transmitidas desde “lo alto” y compartirlas con la humanidad.
Los instructores como Rumi nos ayudan a ver la belleza del alma humana, inspirándonos a vivir desde la conciencia de nuestros Yoes verdaderos. Por su ejemplo viviente y sus obras creativas, nos “muestran nuestra gloria”. Las enseñanzas de la sabiduría nos dicen que el alma guarda “el secreto de la gloria oculta”. Cuando exponemos este secreto que yace dentro nuestro y expresamos nuestra verdadera identidad como almas, glorificamos a Dios. El secreto es que la naturaleza del alma humana es divina. Al hollar el sendero que revela nuestra esencia como fragmentos de lo divino, traemos la belleza interna del alma a la expresión visible en nuestro mundo.
1 Coleman Barks, poets.org
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